El planeta Tierra es un sistema dinámico y en constante evolución, fenómenos como los terremotos y las erupciones volcánicas con los que convivimos a diario como humanidad son prueba de ello. Sin olvidar el sinnúmero de procesos que ocurren en la superficie del planeta como la acumulación de rocas y sedimentos en los ríos, las lluvias intensas, las caídas de materiales, entre muchos otros, que modelan el relieve de la Tierra.
Como consecuencia de estas dinámicas que ocurren desde hace miles de millones de años, en nuestro planeta se generan una serie de fenómenos que representan una amenaza para los seres humanos, sus actividades sociales y económicas, e incluso representan una amenaza para el medio ambiente.
Estos fenómenos son diversos, es por esto que en esta ocasión hablaremos puntualmente de un tipo de amenaza que se propicia principalmente por diversos factores que se dan en la superficie terrestre: los movimientos en masa.
¿Qué son los movimientos en masa?
Quizás no has escuchado hablar de los movimientos en masa, pero de seguro habrás escuchado de los deslizamientos y derrumbes, pues estas son las formas más popularizadas de nombrar dichos fenómenos. Sin embargo, estos términos no están bien empleados y lo correcto es llamarlos fenómenos Movimientos en masa.
Los movimientos en masa son desplazamientos y movimientos de suelo, rocas y materiales orgánicos por la acción de la gravedad a favor de la pendiente, es decir, a favor de la inclinación de un terreno. Son movimientos descendentes que se generan bajo la influencia de diversos factores geológicos, hidrometereológicos, químicos y mecánicos que se dan en la corteza terrestre.
Estos movimientos producen cambios notorios en el terreno como hundimientos, grietas y desprendimiento de grandes volúmenes de material y son una de las causas más frecuentes de pérdidas humanas y económicas alrededor del mundo (Sidle & Ochiai, 2006).
¿Cuáles son los factores que favorecen el desarrollo de los movimientos en masa?
Son muy diversos, pero así mismo existen diversas clasificaciones de estos factores. De forma general, podemos clasificar estos factores en aquellos que son producto de los procesos dinámicos naturales del planeta Tierra, y otros que son producto de las acciones humanas.
Factores Naturales
Veamos cómo el clima, la topografía, la composición de las rocas y suelos y la actividad sísmica son los principales factores naturales que favorecen el desarrollo de movimientos en masa.
- El clima: La saturación de suelos por efecto de las lluvias cambia las propiedades del mismo y hace que pierda cierta resistencia.
- Topografía: Hace referencia a la forma de la superficie terrestre, pues los movimientos en masa son más comunes en terrenos con fuertes inclinaciones.
- Composición de rocas y suelos: La composición mineralógica, el tamaño de partículas, el grado de fracturamiento y descomposición de rocas y suelos determinan la resistencia. En consecuencia, de acuerdo a estas propiedades hay materiales que son más susceptibles a desarrollar movimientos en masa.
Actividad sísmica: La interacción entre placas tectónicas ocasiona movimientos en la corteza terrestre que altera el equilibrio de los materiales como rocas y suelos, además de activar fallas geológicas y favorecer el desarrollo de movimientos en masa.
Factores antrópicos
Conozcamos los factores que se producen por el desarrollo de diversas actividades humanas como la deforestación, excavaciones, sobrecargas y el mal manejo de aguas superficiales que contribuyen al desarrollo de movimientos en masa.
- Deforestación: La eliminación de la cobertura vegetal en zonas de pendiente favorece la rápida infiltración del agua y desgaste del material por efecto de la misma, ocasionando la perdida del suelo y posterior desplazamiento del material.
- Excavaciones: Usualmente estas se hacen cuando se va a desarrollar alguna obra de infraestructura como las vías. Debido a esto es necesario desarrollar obras de estabilización del material para evitar el desarrollo de movimientos en masa.
- Sobrecargas: Las sobrecargas pueden estas asociadas a muchas actividades como las construcciones en las partes altas de las montañas y la inadecuada disposición de escombros en zonas de alta pendiente que propicia el desarrollo de inestabilidades.
Manejo de aguas superficiales: los flujos de agua no controlados como inadecuado manejo a drenajes, descarga de agua en las laderas, fugas en las redes de servicio (tuberías), propician la saturación del suelo y ocasionan un aumento de las presiones internas que favorece el desplazamiento del material.
Evidencias geológicas
Existen rocas, yacimientos minerales y cadenas montañosas de la misma edad y origen que se encuentran ininterrumpidas en continentes separados a miles de kilómetros por océanos. Dos claros ejemplos de esta evidencia son la cadena montañosa que atraviesa África de oriente a occidente y que continua cerca de Argentina, y el cinturón montañoso que comprende Los Apalaches (EEUU) que coincide con montañas de la misma edad y estructuras en Groenlandia, Irlanda, Noruega y Gran Bretaña.Movimientos en masa en Colombia
Según datos de la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD), en los últimos 100 años en Colombia se han registrado más de 11.800 eventos asociados a movimientos en masa. Y como consecuencia de estos, aproximadamente 7.590 personas han perdido la vida y 239.740 familias se han visto afectadas.
Colombia tiene un relieve topográfico abrupto, su relieve es el resultado de una actividad tectónica relativamente reciente y aún en continua evolución. Se caracteriza por la presencia de tres cadenas montañosas y una región con geomorfologías más planas hacia el oriente del territorio nacional.
Las cadenas montañosas del país -cordillera occidental, oriental y central- junto con otras áreas montañosas menos extensas son el principal factor natural del territorio para que se desarrollen movimientos en masa. Adicionalmente, en el país las lluvias intensas y prolongadas son el principal detonante de estos eventos, pero también están influenciados por varios de los factores antrópicos que mencionamos anteriormente.
El Servicio Geológico Colombiano, entidad nacional encargada de evaluar y monitorear las amenazas de origen geológico, dentro de las que están incluidas los movimientos en masa, en el año 2015 elaboró el Mapa Nacional de Amenaza por Movimientos en Masa. Este estudio permitió categorizar diferentes niveles de amenaza por movimientos en masa en el país, definiendo que el 50% del territorio nacional se encuentra categorizado en amenaza baja, el 22% en amenaza media, el 20% amenaza alta y el 4% en amenaza muy alta por movimientos en masa.
Y cuando los datos obtenidos del Mapa Nacional de Amenaza por Movimientos en Masa se traslapan con el Censo Nacional de población, es evidente que más del 80% de la población colombiana se encuentra expuesta a amenaza alta y muy alta por movimientos en masa.
Según la UNGRD el departamento de Antioquia cuenta con el mayor número de registros de movimientos en masa (1.393), seguido por Cundinamarca (1.068), Nariño (1.046), Tolima (957), Boyacá (800), Santander (785), Valle del Cauca (781) y Cauca (736). Los departamentos con mayor número de personas y familias afectadas han sido Nariño, Risaralda, Valle del Cauca, Santander, Cauca, Tolima y Boyacá.
Estas cifras y el registro de movimientos en masa ocurridos en el país evidencian la necesidad a nivel local de conocer, caracterizar y analizar estas amenazas con el fin de implementar medidas que reduzcan la vulnerabilidad de la población colombiana frente a las mismas.