Autora: Laura Becerra
¿QUÉ ES LA TRANSICIÓN ENERGÉTICA?
La transición energética es un cambio estructural a largo plazo de los sistemas energéticos, es decir, de las fuentes de energía que utiliza la humanidad para su desarrollo.
A lo largo de la historia, la humanidad ha atravesado una serie de transiciones energéticas donde ha cambiado sus principales fuentes de energía por unas más eficientes; como lo fue la transición de la leña al carbón, y menos contaminantes como lo fue la transición del carbón a hidrocarburos como el petróleo y gas.
Las transiciones energéticas son procesos que se dan en tiempos prolongados, no es posible lograr una transición energética de un día para otro, pues los requerimientos de energía para suplir las demandas energéticas que propician las formas de vida de la población actual no admitirían una ruptura en el suministro de energía.
Actualmente, el mundo está atravesando por un proceso de transición energética que busca la descarbonización del sistema energético.
La transición energética no se limita a la descarbonización del sistema energético, va mucho más allá de esto por las repercusiones que tiene sobre otros sectores; como el sector transporte e industrial, sobre el clima, la disponibilidad y el acceso a la energía por parte de las poblaciones, la preservación de ecosistemas, y el crecimiento económico.
COMPROMISOS GLOBALES QUE RATIFICAN LA TRANSICIÓN ENERGÉTICA
ACUERDO DE PARÍS
El Acuerdo de París es un tratado firmado por 197 países que tiene como objetivos principales:
- Reducir las emisiones mundiales de gases de efecto invernadero, en otras palabras, aquellos que atrapan el calor y la radiación en la atmósfera.
- Limitar para este siglo el aumento de la temperatura global; es decir, que no supere los 2 grados centígrados con respecto a los niveles previos a la revolución industrial.
- Alcanzar la neutralidad climática en 2050; o sea, que la cantidad de CO2 -dióxido de carbono- liberado a la atmósfera por las actividades humanas, sean iguales a las cantidades que absorben los sumideros naturales de CO2 como los océanos y bosques.
Para dar cumplimiento a los objetivos del Acuerdo de París se hace imprescindible la reducción progresiva del uso de combustibles fósiles; como el carbón, petróleo y gas natural, para disminuir la emisión de gases de efecto invernadero y limitar el aumento de la temperatura global atmosférica.
En este sentido, el Acuerdo está íntimamente relacionado con la transición energética, y, de hecho, sentó muchos precedentes para que los países establecieran metas claras que les permitieran migrar progresivamente de matrices energéticas sustentadas en el uso de combustibles fósiles hacia la diversificación de estas matrices con una progresiva incursión de energías renovables.
OBJETIVOS DE DESARROLLO SOSTENIBLE
Los Objetivos de Desarrollo Sostenible son unas metas acordadas y adoptadas en el 2015 por los países miembros de las Naciones Unidas que buscan garantizar la implementación de medidas globales que impulsen el crecimiento y desarrollo global equilibrando de forma sostenible los ámbitos económico, social y ambiental.
Son diversos los Objetivos de Desarrollo Sostenible que ratifican el proceso de transición energética que esta atravesando actualmente el mundo, entre los que se destacan el ODS 7: Energía asequible y no contaminante, y el ODS 13: Acción por el clima.
Energía asequible y no contaminante: establece metas que busca garantizar el acceso a una energía asequible, fiable, sostenible y moderna para todos. De estas metas varias se destacan como compromisos que propenden por la descarbonización del sistema energético:
- A 2030 se aumentará considerablemente la proporción de energía renovable en el conjunto de fuentes energéticas.
- A 2030 aumentará la cooperación internacional para facilitar el acceso a la investigación y la tecnología relativas a la energía limpia, incluidas las fuentes renovables, la eficiencia energética y las tecnologías avanzadas y menos contaminantes de combustibles fósiles, y se promoverá la inversión en infraestructura energética y tecnologías limpias.
Acción por el clima: Este objetivo busca adoptar medidas urgentes para combatir el cambio climático y sus efectos, y apunta al cumplimiento de la meta del Acuerdo de París, que aspira a reforzar la respuesta mundial a la amenaza del cambio climático manteniendo el aumento global de la temperatura durante este siglo muy por debajo de 2 grados centígrados con respecto a los niveles preindustriales.
PAPEL DE LOS COMBUSTIBLES FÓSILES EN LA TRANSICIÓN ENERGÉTICA
Se estima que los combustibles fósiles se continuarán utilizando como energéticos durante las próximas décadas, pues la transición energética requiere de una eliminación gradual y no repentina de las fuentes de combustible fósiles para poder garantizar la estabilidad, resiliencia y eficiencia del suministro energético global.
El gas como combustible fósil de la transición
El gas en su proceso de combustión emite 30% menos dióxido de carbono que el petróleo y 45% menos que el carbón, es por esto que se considera el combustible fósil para la transición.
Su uso permitirá reducir las emisiones de gases de efecto invernadero a la atmósfera, y adicionalmente brindará confiabilidad a la transición de cara a las intermitencias de las energías renovables mientras el desarrollo tecnológico permite que estas últimas sean más eficientes.
BIBLIOGRAFÍA
https://www.bbva.com/es/sostenibilidad/que-es-el-acuerdo-de-paris-y-que-supone-para-el-planeta/
https://www.un.org/sustainabledevelopment/es/objetivos-de-desarrollo-sostenible/
https://www.enelgreenpower.com/es/learning-hub/transicion-energetica
